El 14 de julio de 2006, durante la excavación de un sondeo de 2 x 2 m. (el sondeo 47) apareció, a unos 87 cm. de profundidad, un pequeño ladrillo rectangular completo que fue coordenado e individualizado in situ para su posterior inventariado y procesamiento.
El ladrillo, como es habitual en el material constructivo de época romana, presentaba una buena capa de adherencias superficiales, si bien, como para esas fechas ya habíamos encontrado los conjuntos de grafitos excepcionales (con lo que estábamos especialmente expectantes a la posible aparición de más material de este tipo) al observar en detalle la pieza, nos dimos cuenta de que parecía tener algo inciso debajo de dichas adherencias, que era imposible de distinguir sin una limpieza. Por ello el ladrillo fue enviado al Servicio de Restauración de la DFA para su procesamiento. Durante el mismo, llevado a cabo por las técnicos del Servicio, se descubrió un nuevo grafito que presentamos aquí.
Lo interesante del mismo es que pudiera corresponder a un sencillo plano de la ciudad de Veleia, con indicación de distintas zonas de la misma. Al menos ésta es nuestra propuesta interpretativa, si bien recibiremos encantados otras ideas.
Nota: El post es largo, pero al que sólo le interese la interpretación del grafito puede pasar directamente al apartado final «Propuesta interpretativa ¿Estamos ante un plano de la ciudad?»
Contexto del hallazgo
La excavación del sondeo 47 se enmarcó dentro de un proyecto trianual (2005-2007) para el «Estudio Histórico-Arqueológico del yacimiento de Iruña-Veleia», financiado por el Gobierno Vasco con la colaboración del Ayuntamiento de Iruña de Oca, cuya voluminosa Memoria científica se depositó a fines de 2007 en Gobierno Vasco, Diputación Foral de Álava y Ayuntamiento de Iruña de Oca.
Entre otras, una de las actuaciones del proyecto, consistió en la excavación de una serie de sondeos estratigráficos (se llevaron a cabo casi 300 en la zona del yacimiento ubicada fuera de la muralla tardorromana), para el mejor conocimiento de su potencial topo-estratigráfico y cronológico, esto es, para determinar la extensión del Área arqueológica en cada una de sus etapas de ocupación y su grado de conservación y potencial según zonas. El objetivo último del proyecto era proporcionar los datos más precisos posibles sobre el yacimiento de cara a arbitrar las medidas más adecuadas y ajustadas para su protección, mediante su inclusión en las correspondientes normativas.
La elección de la ubicación concreta del sondeo 47 (marcado con una flecha amarilla en la fotografía) fue, como la del resto de los sondeos, aleatoria. Concretamente en una zona al sur de la muralla tardorromana que, gracias a las fotografías aéreas tomadas por nosotros con un aeromodelo a escala, sabíamos que estaba densamente urbanizada. Las prospecciones también mostraban un alto potencial para este área, lo cual se vió confirmado por nuestros estudios estratigráficos en los que comprobamos cómo, a partir de los 30-40 cms. de profundidad, ya aparecían los niveles de época romana intactos.
El sondeo se localizaba en las proximidades de la actual zona de excavación del nuevo Plan Director dirigido por Julio Núñez que puede verse en la fotografía de abajo, donde también se señala el punto de aparición del ara de la que más adelante hablaremos y que fue localizada por su equipo.
Los sondeos se excavaban todos hasta la roca ya que su objetivo era precisamente analizar en su totalidad el registro estratigráfico de cada punto de muestreo, su potencial y secuencia cronológica.
La estratigrafía del sondeo 47 era muy sencilla, como puede verse en este gráfico, correspondiente al corte estratigráfico de su cantil E.
Así, sobre la roca, muy buzada (inclinada), aparecieron los restos de un murete correspondiente a una antigua cimentación de una estructura altoimperial (posiblemente de mediados del siglo I d.C.), asentada directamente sobre este sustrato natural. Correspondía a una ocupación anterior y, una vez amortizado, se habría procedido a un rellenado de nivelación en el que quedó englobado este resto estructural, en torno a fines del I-1ª mitad del siglo II d.C.
A este relleno aportado para la preparación de un nuevo nivel de ocupación correspondía la UE 47002 que era, por tanto, un nivel funcional de subsuelo. Y es en ella donde se localizó el ladrillo en cuestión con el grafito. De dicha nueva fase de ocupación ya no se conservaba nada más que este estrato (correspondiente, como hemos dicho, a un nivel de subsuelo de la misma), directamente localizado bajo el nivel de remoción agrícola que, como puede verse, ocupaba sólo los 30-40 cm. superiores del terreno. Al no tener otros estratos suprayacentes que el propio nivel agrícola, no fue posible apurar más la cronología en base a la secuenciación del registro.
En las dos fotos de abajo, sacadas cuando el sondeo ya estaba totalmente excavado (lo que se ve al fondo es la roca y los restos de la cimentación del murete), hemos ubicado el punto aprox. de localización del ladrillo. En la primera foto tendríamos su situación con respecto a la «planta» del sondeo y en la segunda (donde se aprecia la estratigrafía de su lateral E.) en la cota a la que apareció. La escala gráfica ubicada verticalmente en la esquina SE. tiene 1,20 cm. desplegados.
El grafito nº 14469
Como ya hemos señalado, el ladrillo con grafito (de 9 cms. de longitud, 5 cms. de anchura y 2,5 cms. de altura) se localizó en la U.E. 47002, correspondiente a un estrato de preparación de suelo, concretamente en estas coordenadas (tomadas con respecto al ángulo SE. del sondeo) X: 48, Y: 85, Z: 87.
En una de sus caras mayores (de 9 x 5 cms.) presenta un grafito epigráfico y ¿figurativo? en el que las letras se disponen a lo largo de un par de líneas paralelas que parecen trazar un esquematismo que es lo que interpretamos como un posible plano. En principio, la doble línea parecía sugerir un camino o el río, si bien nos inclinamos más por esta última posibilidad ya que es posible que estemos ante la representación muy sumaria de la parte del contorno topográfico del emplazamiento marcada precisamente por el curso fluvial del Zadorra. Volveremos más tarde sobre la propuesta interpretativa de este esquema.
Dicho esquematismo define tres tramos casi perpendiculares entre sí en los que se lee: Tramo derecho: VIILIIIA GORI. Tramo central: VIILIII NOVVA. Tramo izquierdo: VI(…)(A)III.
Nota: Hemos colocado la foto que sigue tal cual fue sacada (con la escala al revés) si bien, no tuvo por qué ser así la orientación de «lectura» o «visualización» de la pieza. Aunque es como el Veleia Novva se lee a derecho.
Debido a los restos aún adheridos en superficie (ya que en Restauración no se apuró la limpieza por razones obvias) y al propio grabado (posiblemente posterior a la cocción del ladrillo), la lectura del grafito es difícil sobre todo en algunos puntos (especialmente en el último tramo señalado). Sin embargo, Veleia Gori y Velei Novva son claramente legibles.
Veamos la parte derecha pero girada 90º (con respecto a la foto anterior) en sentido contrario a las agujas del reloj. Hemos marcado el VIILIIIA GORI para que se vea mejor.
Veamos la parte central también con el VIILIII NOVVA marcado para que se vea mejor
En la parte izquierda es difícil identificar el texto, pero por las letras que pudimos ver, probablemente contenía una tercera alusión a Veleia, quizás incluso con otro adjetivo acompañándola.
Nos encontramos por tanto aquí ante dos/tres menciones a Veleia diferenciadas -al menos dos de ellas- con lo que parece un epíteto que quizás las caracterizara o identificara, grabadas entre dos líneas incisas más o menos paralelas, que se quiebran en ángulo en dos puntos para marcar un cambio de dirección, de forma que se diferencian tres tramos en cada uno de los cuales hay una Veleia grabada.
El esquematismo se podría ver así si leemos Veleia Novva a derecho
Este esquematismo, como veremos más adelante, recuerda grosso modo al contorno de la parte del emplazamiento de la ciudad que está definido por el recorrido del río Zadorra, que es por lo que nos planteamos si no es posible que estemos ante una especie de plano muy simple de la misma. La doble línea parecería sugerir precisamente el trazado del río. Además y si estamos en lo cierto, se nos estaría indicando la existencia de dos/tres Veleias ubicadas en distintas áreas topográficas.
Luego volveremos sobre esto pero primero y ya que estamos tratando esta pieza en detalle, analizaremos el grafito epigráfico propiamente dicho, planteando los problemas señalados por la Comisión, así como la contestación a los mismos.
Problemas de la parte epigráfica del grafito según la Comisión
El nombre de la ciudad romana: Veleia
Siempre se había considerado que el yacimiento de Iruña era el lugar donde, con más probabilidades, se habría asentado la Veleia de las fuentes clásicas. Esta atribución se habría visto confirmada con la aparición de dicho nombre, un total de 12 veces (o incluso 13 si se confirma la tercera lectura de este ladrillo como Veleia), en los grafitos localizados por Lurmen, grabado sobre 9 piezas diferentes (ya que en 3 de ellas, aparecía mencionada 2 veces -o incluso en este caso podrían ser 3- ), así como con la reciente localización, por parte de un equipo de la UPV, de un ara en la que también aparece Veleia como el nombre de la antigua ciudad.
Este último hallazgo, además de confirmar que estamos ante una ciudad con estatuto jurídico como tal, es obvio que vendría a dar veracidad a las menciones a Veleia en los grafitos localizados hace unos años, entre ellas, las dos/tres que estamos analizando aquí, grabadas en un ladrillo. Así, Colmenero, en un informe suyo recientemente difundido, señala al respecto del ara en relación con los grafitos: «
produciéndose así un paralelismo evidente entre los ejemplos de ambas procedencias susceptible de convertirse en aval de autenticidad para los llamados “grafitos singulares”, en entredicho todavía para muchos de los posibles lectores de estas páginas»
http://www.amaata.com/2013/04/veleia-madre-y-diosa-una-nueva.html. Además, se refiere al posible inesivo presente en el Veleian del ara, de forma que podríamos estar, en su opinión, ante un texto bilingüe.
Respecto a la palabra Veleia de los grafitos, el único miembro de la Comisión que en su día le puso pegas fue Gorrochategui quien en su informe
http://www.sos-irunaveleia.org/dictamen-de-joaquin-gorrochategui, señalaba
«Sabemos que el sistema fonológico del vasco antiguo no tenía /w/, a diferencia del latín, que lo expresaba mediante la letra V. Todos los préstamos latinos que poseían este sonido fueron adoptados, salvo por alguna otra causa justificada (p.ej. lat. vagina > magina), con /b/ : lat. voluntate > borondate, etc. En la misma dirección apuntan los escasos datos aquitanos (Vocontia > Bocontia). Teniendo esto en cuenta, resulta muy poco comprensible que el nombre de la ciudad, Veleia, que ya incluso en ciertas fuentes latinas tardías como el Itinerario de Antonino y el Ravenate aparece con B- (Beleia It.Ant. 454,8; Belegia Rav. 4,45) (como consecuencia del proceso de betacismo, que confundió /w/ con /b/ fricativa), aparezca siempre en los óstraca vascos escrito con V”.
Pero el mismo Gorrochategui daba la solución al decir: «Solo podría entenderse como un conservadurismo gráfico del nombre oficial escrito en el Alto Imperio».
Entendemos además que, siendo consecuente, el propio Gorrochategui que ha avalado el Veleia del ara -por cierto, sin cronología estratigráfica-, no mantendría a día de hoy dichas pegas puesto que el Veleia grabado en ella está escrito con esa «V» que tan «muy poco comprensible» le resultaba en los grafitos.
En su informe, Hector Iglesias http://www.sos-irunaveleia.org/iglesias remitía a Jungeman que señalaba: «En el siglo III los gramáticos ponían en guardia contra la confusión de b y v en la escritura«(Jungemann, F. H., 1955: «La teoría del sustrato y los dialectos hispanoromances y gascones», Ed. Gredos, Madrid, pág. 345). Y añadía que «Carnoy trata igualmente en su obra sobre el latín de España de esta cuestión «v y b iniciales precosonánticas y postconsonánticas«, «b por v» y «v por b», y citaba varios ejemplos (Carnoy, A., 1906: «Le latin d’Espagne d’après les inscriptions, étude linguistique«, 2 édition revue et augmentée, Misch & Thron, Bruxelles, págs. 128-141).
Poco más que decir salvo repetir que el Veleia de los grafitos, para el que realmente la Comisión no había opuesto ningún problema serio, se vería avalado en su veracidad por este último hallazgo en un ara, localizada por un equipo diferente y evaluada por tres de los miembros de la misma (Joaquín Gorrochategui, Pilar Ciprés y Julio Núñez).
Gori
Tanto Joseba Lakarra como Joaquín Gorrochategui encontraron problemática la palabra «gori». Así, Lakarra señalaba en su informe para la Comisión
http://www.sos-irunaveleia.org/sobre-supuestas-inscripciones-euskericas-antiguas-de-veleia: «
Que ni gorri ha sido históricamente “rojo” ni que, desde luego, urdin es ni ha sido históricamente “azul” están fuera de discusión. (…). Aún hoy (gorri) significa bastantes otras cosas como “desnudo”, “pelado”, etc., y la onomástica medieval y moderna está llena de gorris “rubios” o “pelirrojos” (…)….. Es difícil, más bien imposible, que gorri y urdin fueran nombres de colores y, en concreto, de rojo y azul en el s. III ni en ningún otro”.
A esto, respondía Juan Martin Elexpuru en su informe
http://www.sos-irunaveleia.org/elexpuru: «
Creo que esto se comenta por sí sólo. Quién dice que los gori y urdin de las ostracas se refieren estrictamente ía los colores rojo y azul? Leemos Veleia(n) gori varias veces; sinceramente, tendríamos mil dudas a la hora de interpretar su significado, pero no creo que se trate de una Veleia de color rojo……»
Por su parte, Hector Iglesias que analizaba largo y tendido el tema, llegaba a varias conclusiones como que hace miles de años que la palabra gorri significaba ya en vasco «rojo», señalando que dejar entender como lo hacen Gorrochategui y Lakarra que algunos siglos antes, es decir, en los siglos III o IV d.C. esta palabra no significaba y no podía significar rojo, es pura fantasía, habiéndose de tener en cuenta el valor polisémico de este vocablo, el cual no ha sido puesto en duda por nadie.
Así que ante la afirmación de Lakarra de que «es difícil pensar que VELEIAN GORRI fuera algo como en la Veleia Roja, sino más bien en cueros en Veleia«, Iglesias señalaba que eso es evidente, que será el contexto el que siempre determinará el verdadero sentido de gorri tanto hoy como hace dos mil años. Pero que no se puede pretender que este término no pueda significar en ningún caso rojo a comienzos de nuestra era porque esta afirmación carece de fundamento.
Pero hay una posibilidad más de traducción, propuesta por Elexpuru que, a todas luces, pudiera resultar la más adecuada (y desde luego atractiva) si estamos en la línea correcta de interpretación del «Gori» de los grafitos en asociación a la palabra Veleia. Elexpuru proponía que «Gori» sería aquí equivalente en realidad a «goiri» o «goiuri», haciendo referencia entonces a una «Veleia de arriba»
http://blogak.goiena.net/elexpuru/2013/02/26/hirutan-veleia-novva-birritan-veleia-gori/. Y, la parte más alta del emplazamiento en que se ubica el yacimiento es la zona de Arkiz, que es aquella en la que la topografía del terreno forma un promontorio triangular en espolón rocoso que cae abruptamente sobre el meandro del Zadorra.
Así que tendríamos una Veleia adjetivada con un «gori», gorri, que podría ser tanto Veleia roja, como Veleia pelada o desnuda (de vegetación se supone) o Veleia de arriba, alta. Este último epíteto es el que nos parece más adecuado ya que destacaría las características topográficas de una zona del emplazamiento a la que pensamos hace referencia. Volveremos luego sobre esto.
Novva (nova)
La única pega a Novva, la buscaba Gorrochategui en la duplicacion de la «V», diciendo que se trata de una grafía incomprensible.
En este sentido hemos de precisar que de las tres veces que aparece este adjetivo, en dos de ellas está escrito como Novva, correspondiendo en ambos casos a cronología altoimperial; en tanto en el otro, el más tardío ya del V d.C., aparece como Nova, dato al parecer prescindible para el lingüista ya que lo ignora.
Contestando ya a Gorrochategui, hay que señalar cómo los casos de consonantes geminadas son bastante habituales en la epigrafía latina con lo cual, no tiene ningún valor ni se sostiene la afirmación de que una duplicación de la «V» en Novva sea una «grafía incomprensible«.
Así la escritura de consonante simple por geminada, por hipercorrección se constata, por ejemplo, en Pompeya donde tenemos Philippus por Fhillipus, uxxori por uxori, quottidie o cottidie por quotidie. En Vindolanda, tenemos la ”V” geminada en februuarius por februarius. En las pizarras visigóticas podemos ver: ammica, anullus, emmisis, gramattius, honorabilli, petittione.
Traemos aquí un apunte curioso. En otro de los grafitos veleyenses grabado sobre una ficha de sigillata y localizado en el sondeo 178 (UE 178004), el nº 17635, se grabó parte de un abecedario ZYXVV / TRSQPO / NM, donde tenemos la “V” repetida, nuevamente en un nivel que no va más allá de principios del siglo III d.C. Curiosamente el abecedario, que está incompleto (y siempre lo estuvo, dado que la ficha en la que se grabó está entera), está escrito al revés, invirtiendo el orden de algunas letras: la R/S en vez de S/R, posiblemente por simple equivocación.
Estamos por tanto ante otra Veleia adjetivada como «novva/nova». En este caso la traducción del término latino no presenta mayores problemas «Veleia la nueva», si bien volveremos luego sobre su interpretación ya que pensamos que se puede estar refiriendo a otra zona de la ciudad que, a pesar de su caracterización como «nueva» convivió durante un largo período de tiempo con la «gori».
A continuación, vamos a rastrear los datos que, en relación a las menciones a Veleia, nos serán proporcionados por los otros grafitos en los que aparece esta palabra. Con éstos y con lo que conocemos del yacimiento gracias a nuestras intervenciones estratigráficas en él, haremos una propuesta de interpretación del grabado que nos ocupa en este post.
Las «Veleias» de los grafitos
Como ya hemos dicho Veleia aparece 12 (quizás 13) veces mencionada en los grafitos encontrados por Lurmen. Concretamente en 9 piezas. Los materiales de grabado son fragmentos de recipientes cerámicos, ladrillos y, en un caso, un hueso. Aparecieron en 4 zonas diferentes del yacimiento (sectores 12 y 6, sondeos 47 y 32) con un ratio cronológico de entre fines del siglo I d.C. y el siglo V d.C.
De estas menciones nos interesará fundamentalmente 1.- su cronología (de hecho, vamos a seguir un orden expositivo cronológico), 2.- la zona en que se localizaron, 3.- si en ellas se especifica o no ante qué Veleia estamos y 4.- qué información nos están aportando al respecto. Prescindiremos de analizar otras partes de los textos, sus problemáticas o sus contenidos.
Las menciones más antiguas: de fines del I-1ªmitad del II d.C. (Ya tenemos Veleia Gori y Veleia Novva)
Con flecha amarilla el lugar de localización en relación al yacimiento
Se trata de dos, quizás tres menciones a Veleia sobre el mismo soporte latericio adscribibles a este momento cronológico (es el grafito que estamos analizando aquí) tal vez asociadas, como es nuestra propuesta, a una especie de plano muy esquemático de la ciudad, más bien una marcación del contorno de su emplazamiento en la parte definida por el recorrido del río Zadorra.
Aparecen claramente las dos Veleias: Veleia Gori y Veleia Novva y quizás una tercera de la que, por el momento, sólo podemos decir que parece una nueva mención seguida de unas letras que no podemos determinar y que quizás nos indicaran otra Veleia más ….. o no.
El grafito con las dos/tres menciones más antiguas a Veleia, fue localizado en la parte Sur de la ciudad, en el estrato U.E. 47002, en un nivel de acondicionamiento, en un subsuelo. Consideramos que la cronología del grabado se ajustaría bastante a la de la formación del estrato a fines del siglo I-1ª mitad del II d.C. ya que, al corresponder a un vertido intencionado, lo más probable es que se ejecutara poco antes de su incorporación al mismo.
Claro está que el ladrillo pudo haber tenido un uso como material constructivo en una estructura (posiblemente un suelo) anterior, quizás de mediados del I d.C. que es cuando Veleia empezó a urbanizarse a la romana. Se preguntarán entonces por qué no es factible que el grafito sea de este momento. Pues les diré que es perfectamente factible pero que no sería lógico porque este tipo de ladrillos que se suelen utilizar para suelos y, en menor medida, en paredes, suelen disponerse decorativamente constituyendo un opus spicatum (esto es, en espina de pez), de forma que estas piezas se colocaban «de canto» con lo cual, sólo sería visible uno de sus laterales y no las superficies planas, como puede verse en la foto.
Por tanto, no tendría sentido haber ejecutado en ese momento el grafito puesto que no se vería. De ahí que nos inclinemos a suponer, aunque no hay que descartar ninguna posibilidad, que es más lógico que se grabara cuando ya el ladrillo no era parte de una estructura. En nuestra opinión éste, una vez amortizado de su uso como material constructivo, tuvo un uso secundario como soporte para el grafito en un momento que creemos correspondiente al de su vertido en un relleno constructivo para el acondicionamiento de un subsuelo.
Esta pieza supondría que, para época flavia o poco después, ya existirían las dos Veleias que conocemos a través de los grafitos, correspondiendo a un momento cronológico en el que la ciudad ya habría alcanzado su máxima extensión y la configuración que tuvo hasta su drástica reestructuración a fines del siglo III d.C.
El grafito en cuestión sería éste (aunque está expuesto más arriba ya que es el objeto del post, lo volvemos a agrupar con el resto aquí):
.- Grafito nº 14469
(sondeo 47, U.E. 47002). Grabado sobre un ladrillo de pavimento completo, en una de sus superficies mayores.
Transcripción y descripción. Esquematismo con dos trazos paralelos que definen tres tramos casi perpendiculares entre sí (¿plano?), en los que se lee. Tramo derecho: VIILIIIA GORI. Tramo central: VIILIII NOVVA. Tramo izquierdo: VI(…)(A)III
http://www.sos-irunaveleia.org/ostracabase:14469
Interpretación del Veleia dentro del texto. En realidad, en este caso, Veleia es lo que centra el contenido del grafito:Veleia Gori, Velei(a) Novva, V(elei)a… Tenemos menciones de al menos dos, sino tres, Veleias diferenciadas en un sentido geográfico más que cronológico (a pesar del «novva»). Si estamos interpretando correctamente el esquematismo, su distribución es topográfica porque están representadas en una especie de plano que las distribuye espacialmente y, entendemos, coetáneamente.
Menciones de fines del II-principios del III d.C. (Siguen apareciendo Veleia Gori y Veleia Novva)
Con flecha amarilla el lugar de localización en relación al yacimiento
En esta cronología, tenemos 5 menciones a Veleia, grabadas en 4 soportes diferentes, todos ellos de cerámica común. En 3 tenemos a Veleia Gori, si bien en uno aparece junto a ella una mención a Veleia Novva (también escrita con duplicación de la «V» como en el caso más antiguo). En otra el nombre aparece sin adjetivar. Todas estas evidencias se localizaron en la zona NW. de la ciudad, hacia el espolón de Arkiz, en el mismo estrato, la U.E. 32005-C, correspondiente a un nivel de ocupación directamente ubicado sobre un suelo de pequeñas piedras. Consideramos que la cronología de los grabados se ajustaría bastante a la del estrato ya que estamos ante un nivel de uso que no tuvo mucha duración temporal a juzgar por la secuencia estratigráfica.
En estos momentos en que la ciudad seguía aún manteniendo su máxima extensión, no habiéndose producido aún el fenómeno de reducción de la misma y repliegue al interior del circuito amurallado que se producirá hacia fines de la IIIª centuria, los grafitos nos informan de que aún seguían coexistiendo la Veleia Gori y la Novva.
Es muy interesante destacar que estos grafitos están escritos en vasco, donde Veleia aparece en inesivo de lugar en dónde, excepto en un caso.
Veamos los grafitos en cuestión:
.- Nº 15921 (sondeo 32, UE 32005-C). Grabado sobre cerámica común
Transcripción. VIILII / IAN OSO / LAGVN , / MARCVS / N
http://www.sos-irunaveleia.org/ostracabase:15921
Interpretación del Veleia dentro del texto. Veleian oso lagun, Marcus N. La información que tenemos aquí parece de carácter absolutamente personal, donde Veleia es el lugar en el que se sitúa al personaje del que se nos da la información. Elexpuru es su informe daba dos posibilidades de traducción: «En toda Veleia, amigo Marcus» o «En Veleia (es) muy amigo Marcus». De las menciones a Veleia en este sector, es el único caso en que no se especifica nada más sobre la ciudad. Sin embargo en el resto se nos da una información que vincula directamente al que hizo el grabado con Veleia Gori, incluso viviendo en ella. Por eso quizás podamos proponer que el buen Marcus no vivía en esta parte de la ciudad sino en otra de la que no se nos da más información. No sabemos si quien escribió el grafito vivía en Veleia Gori, aunque es muy probable.
.- Nº 16364 (sondeo 32, UE 32005-C). Grabado sobre cerámica común
Transcripción. NIIV VIILIIIAN/ GORI BISI NA,
http://www.sos-irunaveleia.org/ostracabase:16364
Interpretación del Veleia dentro del texto. Neu Veleian gori bisi na, Nuevamente una información de carácter personal «Yo vivo en Veleia Gori». Creemos que es importante para el objeto de nuestro estudio, dado que si el que hizo el grafito vivía en Veleia Gori y el grafito se localizó en un nivel de ocupación, podemos interpretar que el sondeo en el que se identificó estaría en dicha zona de la ciudad.
.- Nº 16365 (sondeo 32, UE 32005-C). Grabado sobre cerámica común
Transcripción. Superficie interior: NIIV LAIKI / (ηλLOς) NA , / XI VRTII TV, / VIILIIIAN / GORI BISI TA / ES TA
Superficie exterior: VIILIII NO/VVA, BANA /OSO V POLI / TA, NIIV / RII ATA / ARAINA/ ARRAPA
http://www.sos-irunaveleia.org/ostracabase:16365
Interpretación del Veleia dentro del texto. Neu Laike (helios?) na, XI urte tu, Veleian gori bisi ta es ta Velei(a) Novva, bana oso u polita, neure ata araina arrapa
La lectura del texto es continua, comenzando en lo que en su día fue la superficie interior del recipiente y siguiendo en la exterior. Nuevamente el grabador del grafito nos da una información de carácter personal, proporcionándonos datos como el de su posible nombre (Laike), edad (11 años), el lugar de residencia (Veleia Gori) y datos adicionales (como que su padre padre coge peces).
Bien, centrándonos en lo que nos interesa ahora, tenemos al parecer a un niño o niña de 11 años que nos dice que vive en Veleia Gori. Pero aquí se nos proporciona una información adicional ya que nos añade que esta Veleia no es Veleia Novva, pero que es muy «polita». Tenemos aquí un segundo caso en el que se nos señala la existencia de dos Veleias diferentes espacialmente y, entendemos, que de aspecto, puesto que parece que se nos señala que la Gori es «polita» en contraposición con un rasgo positivo (¿quizás su monumentalidad?) de la Novva que no se nos especifica.
.- Nº 16366 (sondeo 32, UE 32005-C). Grabado sobre cerámica común
Transcripción. NIIV LAIKII TA / VIIL[IIIA]N GORI
http://www.sos-irunaveleia.org/ostracabase:16366
Interpretación del Veleia dentro del texto. Neu Laike ta Veleian gori. Nuevamente una información personal en la que alguien aparentemente llamado Laike (¿sería el mismo grabador que el del grafito anterior? pero la caligrafía parece diferente….), menciona Veleia Gori pero no nos da más información ¿Querría también decir que vivía en ella?
Menciones de fines del III-principios del IV d.C. (Veleia, sólo Veleia, sin más precisiones)
Con flecha roja el lugar de localización en relación al yacimiento
Estamos ante 3 menciones a Veleia individualizadas en distintos soportes: una sobre cerámica común y dos sobre ladrillos. No se especifica más ni se menciona la Gori o la Novva. Grafitos localizados en un mismo estrato U.E. 6076, correspondiente a un derrumbe sobre un suelo que incorporó los materiales que estaban en él y, entre ellos, los grafitos. Consideramos que la cronología de los grabados se ajustaría a la del estrato puesto que quedarían incorporados al derrumbe al poco tiempo de su ejecución, ya que éste cayó sobre una superficie de suelo en uso. Pensamos además que el recinto correspondía, muy posiblemente, a una domus ecclesia, y dado el carácter de los grafitos, nos reafirmamos en que lo más lógico es que el material estuviera en uso cuando cayó el derrumbe.
Es muy interesante que aquí aparezca sólo Veleia y, además, en inesivo/locativo vasco «Veleian», esto es, «en Veleia» (en el único caso abreviado, pensamos que posiblemente tenía la misma lectura) y que aparezca siempre en relación a un personaje (Samuel), que parecería ostentar un cargo religioso (Pater pontifice) vinculado a la ciudad.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el momento propuesto para el grabado de estos grafitos vendría a coincidir con la época en que el asentamiento habría perdido gran parte de su extensión, si bien la domus ecclesia se asentaba en la zona de la ciudad que aún se mantendría ocupada en época tardía, dentro del recinto amurallado. Quizás la Veleia Gori ya había desaparecido puesto que no vuelve a aparecer en la documentación epigráfica localizada. Sabemos por un grafito posterior, que aún existía una Veleia Nova que debía corresponder con la ciudad tardorromana. Pero el caso es que en los grafitos del sector 6 esa información no parece interesar y solo se nos transmite el nombre de Veleia.
Muy interesante también que aparezca tanto en textos en vasco como en textos bilingües euskera/latín, puesto que se asocian a un contexto que interpretamos como de evangelización cristiana. Al material epigráfico se unen unas representaciones iconográficas muy claras en este sentido.
Veamos los grafitos en cuestión:
.- Grafito nº 13369 (sector 6, U.E. 6076). Grabado sobre cerámica común.
Transcripción. SAMVIIL, MARIO / VIILIIIAN JAVN
Interpretación del Veleia dentro del texto. Samuel, Mario Veleian jaun. Texto escrito en vasco antiguo, en el que se nos dan tres informaciones básicas:
1.- El nombre de dos personas o personajes: Samuel y Mario, también vinculados en otro grafito (el nº 13380 que vemos más abajo)
2.- Un lugar, una ubicación para los mismos: Veleian con la -n final del inesivo vasco: «en Veleia»
3.- Una información relativa a alguno de los personajes o a ambos, no lo podemos precisar porque nos falta la marca del plural. Y no es una información baladí ya que, por el mismo grafito nº 13380, podríamos suponer que la palabra «jaun» está referida a alguien importante «en Veleia». Importante además en un sentido religioso.
Por tanto Samuel y Mario, señor/señores en Veleia. De hacer referencia el jaun a uno de ellos sólo, sería a Mario puesto que Samuel aparece gráficamente separado.
.- Grafito nº 13374 (sector 6, U.E. 6076). Grabado sobre ladrillo.
Transcripción. Cara A: SAMV (La V incompleta) / VIILIII / ATHII / PON(T?). Cara B: IIISVS (la primera S de Iesus remata en flecha hacia abajo) / YA FIL / MIRIA (la A incompleta) / IIX VIR
Interpretación del Veleia dentro del texto. Samu(el) Velei(an/ae?) (P)athe(r) pont(ifice?) ….. Iesus Ya(vhe) fil(io?) Miria(m/n?) ex vir(gine?). El texto parece estar escrito en latín (aunque no sería descartable un locativo vasco en Veleia), con gran parte de las palabras abreviadas (hemos puesto entre paréntesis una propuesta de terminación de las mismas). Nos centraremos en la Cara A del ladrillo puesto que es la que contiene el Veleia y la otra parte no añade información al respecto (aunque corrobora el carácter religioso cristiano y el componente hebreo: Yavhe, Mirian). Nos encontramos, como en el caso anterior, con tres informaciones básicas:
1.- Vuelve a aparecer el personaje de Samuel
2.- Nuevamente está vinculado a Veleia
3.- Samuel parece ostentar un «cargo religioso» como «pather pontifice»(así expresado en otros grafitos)
Tenemos casi la misma información que en el caso anterior, si bien ahora referida sólo a Samuel y con una mayor precisión en cuanto a su función en relación a Veleia.
.- Grafito nº 13380 (sector 6, U.E. 6076). Grabado sobre ladrillo. Tiene dos partes separadas en la misma superficie del ladrillo.
Transcripción. Parte A: SAMVIIL IIISVS NIITO (la primera S de Iesus remata en flecha hacia abajo) / VIILIIIAN / PATHIIR PONTIFICII. Parte B: MARIO CAYO / MAXIMO / PONTIFICII
Interpretación del Veleia dentro del texto. Aquí los grafitos no están en dos caras distintas con contenidos independientes (aunque vinculados temáticamente) como en el caso anterior. Aquí tenemos dos grafitos grabados en una misma cara del ladrillo, conformando textos separados, físicamente independientes pero muy relacionados al presentarnos a dos personajes que ya conocíamos: Samuel Iesus neto Veleian Pather pontifice ….. Mario Cayo Maximo pontifice. Estaríamos ante un texto en latín si bien con algún término en localivo vasco, concretamente observable en el «Veleian». Tenemos aquí de nuevo el tipo de información que hemos visto en los epígrafres anteriores, si bien algo más especificada:
1.- Los personajes de Samuel y Cayo, que aparecen nuevamente vinculados, como en el grafito nº 13369, si bien ahora con algo más de información sobre cada uno.
2.- Una referencia de lugar -en Veleia- que, en este caso, sólo parece referirse a la figura de Samuel.
3.- Vinculación de cada personaje a un cargo religioso: el de Pater pontífice para Samuel (además «en Veleia», como si fuera un cargo vinculado a la ciudad) y el de Máximo pontífice para Mario Cayo.
4.- Disponemos de una curiosa información adicional relacionada con Samuel, «Iesus neto». En opinión de Alicia Satué podríamos traducir esto como «nacido de Jesús» Independientemente del significado evangélico de esta información, nos proporciona el dato de que estamos ante un contexto de carácter claramente cristiano por la vinculación que se establecería entre Samuel y la figura de Jesús, quizás queriendo remarcar la importancia de la figura o del cargo religioso de Samuel. Aquí es Samuel y no Mario Cayo para el que se nos señala su vinculación a la ciudad ¿Quizás Mario Cayo sería un cargo de más alto rango y de contenido territorial más amplio?
Vemos por tanto que los tres grafitos en los que aparece Veleia en esta cronología correspondiente a un momento en el que la ciudad ya estaría reducida al interior del núcleo amurallado, la información presenta un carácter religioso cristiano, vinculando a la ciudad a unos personajes, especialmente a Samuel, que ostentan sendos cargos religiosos.
Mención del siglo V d.C. (Ya sólo tenemos una Veleia Nova)
Con flecha roja el lugar de localización en relación al yacimiento
Dos menciones a Veleia sobre el mismo soporte óseo adscribibles a este momento cronológico. Ya sólo aparece Veleia Nova y no Veleia Gori. Grafito localizado en el estrato U.E. 12077, identificado en la parte inferior de una antigua cisterna de agua ya amortizada. Consideramos que la cronología del grabado se ajustaría bastante a la de la formación del estrato en el siglo V d.C. ya que, al corresponder a un depósito intencionado, lo más probable es que se produjera poco antes de su incorporación al mismo.
Hemos de tener en cuenta que en esta cronología tardorromana, la extensión de la ciudad se había reducido bastante, a algo menos de 12 Ha, constreñidas además al interior del cinturón amurallado construido en torno a fines del siglo III d.C.
El grafito en cuestión sería el siguiente:
.- Grafito nº 13274 (sector 12, U.E. 12077). Grabado sobre un fragmento de hueso.
Transcripción. En una superficie del hueso: IN / VIILII / IA VICI En la otra superficie: VIILIIIA / NOVA
Interpretación del Veleia dentro del texto. Como en el caso más antiguo, también aquí es Veleia la que centra la información que nos transmite el grafito.
In Veleia vici Veleia Nova.
Con respecto a la primera parte del texto, «In Veleia vici», no tiene mucho sentido desde el latín ni tomado como latín vulgar. En su día, Juan Martín Elexpuru http://www.sos-irunaveleia.org/elexpuru, en su Informe traducía este texto como «Vivir en Veleia», de forma que para él «vici» sería un verbo escrito en vasco, significando «vivir». En el apartado de léxico, incluía este término junto con otros también grabados en los grafitos con el mismo significado «bisi (2), vici (2), bici: vivir, vivo; bisi, 16364, 16365a; bici, 13335; vici, 12077, 13234b». Por otra parte consulté a Alicia Satué quien ha llegado por su cuenta a la misma conclusión que Elexpuru, de forma que estaríamos ante un texto bilingüe en el que tendríamos una parte en latín «In Veleia», «En Veleia» y otra en euskera, donde «vici» vendría a ser «bizi» «vivir/vivo», solo que escrito con «V» (aunque Gorrochategui esté seguro de que ya que el euskera antiguo sólo utilizaba la B) quizás, según me dijo ella, como calco del latín, vivere, utilizando su V latina en un verbo con ese significado.
Veleia Nova, la segunda parte del texto es latín sin más. Aquí además con un Nova escrito sin duplicación de la «V» como en los casos anteriores.
Así, tendríamos una información muy simple: Vivir/vivo en Veleia, Veleia Nova
Propuesta interpretativa ¿Estamos ante un plano de la ciudad?
Volvamos al grafito en el que creemos poder identificar un plano esquemático de la ciudad, más bien parte del contorno de la misma. Lo vamos a colocar en la posición de la fotografía aérea disponible, de forma que estaría orientado aproximadamente al norte.
Vamos a marcar la doble línea gráfica.
Ahora vamos a mostrar la fotografía aérea del emplazamiento. No podemos pasar por alto la similitud que presenta el trazado de la doble línea del grafito con el del río Zadorra en esta zona, donde un marcado meandro definiría el contorno de una gran parte del emplazamiento donde se ubicó la antigua ciudad de Veleia. Así, sus partes norte, oeste y sur quedarían más o menos definidas por el curso fluvial.
Si colocamos el trazado del grafito sobre la fotografía aérea, únicamente una de las líneas gráficas para simplificar la información, vemos cómo, efectivamente, su recorrido viene a coincidir grosso modo con el del río que, como hemos dicho, es el que define el contorno de parte del emplazamiento urbano. Ello nos llevará a lo que sería nuestra propuesta interpretativa de lo que pudiera estar representando este grabado. Obviamente no se nos traza el contorno con exactitud pero sí tiene una similitud notable. Cierto es que esta «delimitación» deja fuera la parte sur y algo de la este de la ciudad que ya existiría en el momento del grabado del grafito.
Podemos ajustar la línea gráfica de distintas formas jugando con la exterior o la interior (para simplificar). Colocaremos los textos más o menos en su posición. Por ejemplo la exterior podemos ajustarla así
O así, limitando más el contorno
Con la interior podemos hacer lo mismo (aquí los textos quedan en otra posición).
Quedándonos con uno de estos contornos (el primero por ejemplo), vamos a marcar, en azul, la extensión aproximada de terreno que ocupó la ciudad altoimperial. Vemos que, con respecto a la roja del grafito, sólo quedaría fuera la zona sur correspondiendo justo a la parte en que el trazado del grafito no se cierra y una pequeña zona del este. Así pues, nuestra propuesta es de que estamos, efectivamente, ante un plano muy esquemático, más bien un trazado del contorno de la antigua ciudad de Veleia. Y en este marco parecen habérsenos indicado varias partes de la misma, topográficamente diferenciadas, una denominada como Gori, cuya ubicación propuesta señalamos con una flecha, en el espolón de Arkiz (parte oeste del núcleo urbano); otra como Novva, cuya ubicación propuesta marcamos del mismo modo y que correspondería a la parte central o nuclear de la ciudad (en el plano en un color lila, con lo cual vendría a coincidir quizás con lo que posteriormente fue la ciudad tardorromana) y tal vez una tercera cuyo epíteto desconocemos y que no sabemos si se podía referir a la parte este de la ciudad. Al no tener más datos de la misma ni en éste ni en otros grafitos, no podemos decir más.
Esta ubicación topográfica de las Veleias Gori y Novva, se vería confirmada por los datos que nos proporcionan otros grafitos que, en distintas cronologías, nos informan sobre las mismas.
Ordenemos los datos cronológicamente
.- A fines del siglo I d.C., en la pieza que nos ocupa, el ladrillo IR-14469, es donde encontramos las más antiguas menciones a Veleia y ya aparecen las dos, la Gori y la Novva lo cual supondría que, si estamos en lo cierto y se trata de la representación de un plano de la ciudad, para época flavia o poco después, ya existirían o, mejor, coexistirían las dos Veleias que conocemos a través de los grafitos, las cuales ocuparían zonas diferentes. Si hacemos caso de las indicaciones del grafito, la Veleia Gori pudiera haber estado situada en la parte más alta del emplazamiento, el espolón sobre el río conocido como Arkiz y la Veleia Novva pudiera haberse ubicado en la parte central de la ciudad. A anotar el hecho de que el lugar donde se localizó el ladrillo quedaría fuera del área delimitada en el plano.
No estaría de más señalar que es precisamente entre fines del I y el siglo II d.C. cuando la ciudad alcanzó su mayor extensión y potencialidad, correspondiendo a época flavia el momento más prolífico a nivel constructivo siendo además en el que la ciudad alcanzó su forma más o menos definitiva y su máxima extensión de en torno a 80 Ha. De ello tenemos constancia tanto a través de nuestras excavaciones en diferentes sectores del área que en época tardorromana quedó amurallada, como en los sondeos e intervenciones estratigráficas llevadas a cabo en el resto de la superficie del yacimiento. No sólo eso, sino que es a esa época a la que parece corresponder la monumentalización de la ciudad. De hecho, al menos en la zona central, a una primera fase edilicia de urbanismo romano le sucede otra donde se monumentalizan los edificios tanto públicos como privados.
.- A fines del II-principios del III d.C., los grafitos del sondeo 32 nos informan de que cuando la ciudad aún mantenía su configuración altoimperial, ambas Veleias seguían coexistiendo y eran además diferentes, ya que la Gori, aunque no era como la Novva, era «oso polita». Además algunas de las menciones a Veleia Gori nos informan de que es el lugar «en donde» estaban viviendo las personas que los grabaron. Con lo cual podemos proponer que el sondeo 32, mejor dicho, el ámbito doméstico en el que se llevó a cabo y que es en el que se localizaron los grafitos, estaría dentro de la zona denominada como Veleia Gori. Y el sondeo se localizaba en el inicio del espolón de Arkiz.
.- A fines del III-principios del IV d.C., en los grafitos del sector 6 (situado en la parte central de la ciudad), sólo aparece mencionada Veleia sin adjetivar, en textos de carácter evangélico.
Por un lado, es muy posible que la Veleia Gori ya hubiera desaparecido en este momento. Si estamos en lo cierto en nuestra interpretación y ésta se ubicaba en Arkiz, éste es un hecho comprobado estratigráficamente. Hay que tener en cuenta que el momento en que se grabaron estos grafitos vendría a coincidir con el de construcción de la muralla tardorromana, precisamente en torno a fines de la tercera centuria. Para esta época el asentamiento habría perdido gran parte de su extensión. De hecho por nuestros estudios estratigráficos sabemos que para entonces gran parte de la ciudad (incluyendo la zona de Arkiz) ya se habría desocupado y es un hecho que la Veleia Gori desaparece de la documentación epigráfica localizada. Sería un dato más para la identificación de sus emplazamientos.
Por otro lado, la ciudad queda constreñida al interior del nuevo recinto amurallado, dentro del que se ubicaba la domus ecclesia en la que se localizaron estos grafitos de carácter religioso (sector 6 de excavación). Esta nueva ciudad se mantendría ocupada hasta época tardía, posiblemente con la denominación de Veleia Nova tal y como veremos a continuación, aunque no se especifique en estos grafitos, quizás por estar transmitiendo mensajes de calado religioso en los que lo importante era la mención a Veleia como núcleo urbano.
.- Al siglo V d.C. corresponde la última mención a Veleia en los grafitos, apareciendo concretamente como Veleia Nova (ahora ya con una sola «v»). Esa Veleia Nova tardorromana, ubicada posiblemente en el mismo emplazamiento de la Veleia Novva altoimperial quizás estuviera conservando la denominación para lo que ahora era una ciudad constreñida al interior de un recinto amurallado o tal vez se estuviera refiriendo a una ciudad nueva en la que se constatan numerosas reedificaciones y una reurbanización que se amolda a la muralla.
Por tanto nuestra propuesta interpretativa sería que
Veleia Gori se podría identificar con una parte de la ciudad, concretamente, la zona conocida actualmente como Arkiz. Esto es, más o menos pensamos que podría referirse a este área marcada abajo en azul.
Ya hemos visto cómo el adjetivo»gori», gorri, podría ser tanto Veleia roja, como Veleia pelada o desnuda (de vegetación se supone) o Veleia de arriba, la alta. Este último epíteto es el que nos parece más acertado ya que destacaría las características topográficas de esta zona del emplazamiento a la que pensamos hace referencia, donde el terreno forma un promontorio triangular en espolón rocoso con un fuerte escarpe sobre el meandro del río Zadorra.
Por tanto, podemos proponer que Veleia Gori se podría corresponder con la parte de la ciudad situada en la parte alta, en la zona de Arkiz, que comenzaría a edificarse a la romana a mediados del siglo I d.C. y que se mantendrá ocupada hasta algún momento del siglo III d.C. desocupándose para fines de esta centuria, momento en que la ciudad reduce su tamaño, se reestructura y su hábitat queda constreñido al interior del recinto amurallado.
Otra cuestión es si el Veleia Gori se pudiera referir también al antiguo asentamiento prerromano de los caristios en contraposición a la otra mención a una Veleia Novva que correspondería propiamente a la ciudad romana. Pero entonces… ¿por qué no usaron el adjetivo viejo o antiguo en lugar del de Gori para referirse al antiguo poblado, si lo que querían era marcar la diferencia entre el antiguo poblado y la nueva ciudad? Cierto que la zona de Arkiz estuvo densamente ocupada en época prerromana. Era un asentamiento de fuerte carácter estratégico que, posiblemente, fue una de las características por las que se escogió para asentar el poblado. Ahora bien, en nuestros trabajos en el yacimiento, pudimos comprobar que también ocupaba una amplia zona más al sur hasta alcanzar unas 50 Ha. de extensión, esto es, no se limitaba a la zona de Arkiz. Toda la extensión que había ocupado el antiguo poblado se reurbanizó conformando la ciudad altoimperial que alcanzó una superficie mayor llegando a las 80 Ha.
Por eso nos decantamos más porque Veleia Gori hace referencia a la ciudad romana que ocupó la zona de Arkiz en época altoimperial.
Por su parte Veleia Novva (después Nova), podría identificarse con la parte central del núcleo urbano aquella que, según nuestros datos, sería la más monumentalizada tanto en el ámbito público como en el privado. Podría corresponder grosso modo a la zona que señalamos aquí en azul.
Estaríamos por tanto ante otra Veleia adjetivada como «novva/nova», esto es, como nueva. Pensamos que esa indicación tendría que tener una relevancia en cuanto a querer marcar precisamente que se trataba de «la nueva Veleia», quizás por corresponder a la parte de la ciudad que se benefició (posiblemente a partir de época flavia a juzgar por los datos estratigráficos que tenemos) de un programa constructivo más monumental asociado, lógicamente a aquella zona con una orografía más adecuada, esto es, la parte central y del emplazamiento. Aunque esta zona ya había sido urbanizada a la romana con anterioridad de forma coetánea a la del espolón de Arkiz, será a partir de este momento de fines del I d.C. cuando parece que se monumentaliza tanto en sus construcciones públicas como privadas, no así la zona de Arkiz. Y en ese sentido, podríamos encajar también cronológicamente el «Novva».
Por tanto creemos que Veleia Novva o Nova, se correspondería a la parte central de la ciudad, la más monumentalizada y reurbanizada a partir de época flavia y que será la que perviva, reestructurada, en época tardorromana hasta el final de la vida en el asentamiento.